El futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha arrancado su intervención en el debate de investidura a la hora del ángelus. Inspirado, ha hecho buenos los peores pronósticos sobre sus objetivos y ha anunciado que "todo" es revisable con tal de conseguir recortar el déficit público en 16.500 millones de euros para el próximo ejercicio.
Tal y como adelantaba ayer este Diario, Rajoy ha puesto el énfasis en su discurso en el saneamiento de las cuentas públicas, pasando de puntillas por las necesidades de los ciudadanos, objetivo último -en principio- de la actuación política. El brindis al sol de que su prioridad será recuperar el empleo prácticamente no ha merecido ninguna concreción, salvo la de empeorar drástica y súbitamente las estadísticas de paro que, según la cifra que ha aportado el futuro Presidente ya se sitúa en e 5,4 millones de españoles con un porcentaje de desempleo de casi el 23%.
Donde sí se ha mostrado mucho más concreto el líder de la derecha, muy aplaudido por su bancada, incluso por los diputados encuadrados hasta antes de ayer en el ala díscola del PP, hasido en fijar la cuantía total del tijeretazo que piensa meter a las cuentas públicas: 16.500 millones en 2012, casi 1.400 millones de euros al mes.
Según las cuentas que ya sí tiene Rajoy, pese a que hsta momentos recientes se escudaba en su desconocimiento para no concretar sus propuestas, el déficit rozará los 65.000 millones al final de este año, según las previsiones del anterior gobierno. "Ese es nuestro compromiso y a él nos vamos a atener", ha dicho, recalcando que “todo está en revisión” y supeditado a cumplir con las ansias de empobrecimiento general que fijan los caprichos de los mercados, para los que no ha tenido ni una sola frase de reproche, ni una sola mención crítica.
Actualizar las pensiones
Rajoy se ha comprometido a actualizar las pensiones a partir del próximo 1 de enero de 2012. "Este sería el único compromiso que me van a escuchar en el día de hoy de aumento de gasto. El único y exclusivo", ha dicho Rajoy en el Debate de Investidura, tras adelantar que presentará el nuevo cuadro macro cuando la Unión Europea presente su prospectiva anual de crecimiento, y después traerá el nuevo techo de gasto a la Cámara.
Con esta base, el Gobierno de Rajoy actualizará el programa de estabilidad y, cuando disponga de los datos definitivos de déficit público, presentará en la Cámara los Presupuestos para 2012 antes del 31 de marzo.
"No renunciamos a hacer del presupuesto un instrumento fundamental de la política económica", ha dicho tras asegurar que analizará todas las partidas para asegurar que no se gasta "ni un euro de más". Evidentemente, Rajoy no ha explicado cuál es el criterio para definir si “un euro se gasta de más o de menos”.
Lo que si ha dicho es que los presupuestos que presentará en marzo nacen con libertad y criterio vigilado, ya que no descarta corregirlos y endurecerlos a lo largo del ejercicio si los recortes no son suficientes para los mercados.
Fuente: www.diarioprogresista.es
